
Edie Sedgwick nació en Santa Barbara, California, en el seno de una familia acaudalada procedente de Massachusetts.Los Sedgwick llevaban generaciones triunfando socialmente: no sólo eran ricos, sino también refinados e influyentes.Al llegar a la mayoría de edad, Edie celebró su puesta de largo y fue inscrita como debutante en el Registro Social. Edie era guapa, elegante, educada en caros colegios y se esperaba de ella un buen matrimonio y un rotundo éxito social. Pero eso no era lo que Edie pensaba hacer.
En 1964, nada más cumplir los veintiún años se instaló en Nueva York.Sus padres debieron decirse que no era un mal lugar para encontrar marido, así que le entregaron una parte de su herencia y la dejaron instalada en casa de su abuela, que vivía en un piso de catorce habitaciones en Park Avenue.
Edie quería brillar en Manhattan,pero no como la debutante cursi típica de las galas del Waldorf Astoria: deseaba adentrarse en los territorios de la modernidad, reinar en los templos de la nueva ola.Cada noche, después de besar a su abuela, se zambullía en la noche neoyorkina donde no tardo en hacerse notar.
Pero Edie no hubiese podido ser lo que fue sin la ayuda del que se convirtería en su inseparable amigo Andy Warhol. Éste conoció a Edie Sedgwick en una fiesta en el ático de Lester Persky, un productor de publicidad cuyo privilegiado apartamento en la calle 59 era lugar de encuentro de la élite social e intelectual del Nueva York de los sesenta. Andy se sintió fascinado por aquella muchacha joven y esbelta, alta y delgadísima, de largas piernas y ojos oscuros.De no haber sido homosexual, Warhol la habría pedido en matrimonio aquella misma noche. Antes de marcharse, hizo a Sedwgick lo más parecido a una declaración de amor: “Quiero hacer una película contigo”.
Desde ese momento Edie anduvo por un camino lleno de éxitos que le llevó hasta La Factory. Allí podía encontrarse a Rudolph Nureyev, Tennessee Williams, Jackson Pollock, Jane Fonda, William Burroughs. Judy Garland, Roy Liechtenstein o Jim Morrison. Por supuesto, también los policías eran asiduos visitantes del local cuando, alertados por los vecinos, se convertían en artistas invitados que contemplaban, atónitos, los desmadres de Andy y sus amigos.
Edie se convirtió en la musa de Warhol, grababa contiuamente películas con ella como protagonista, sin ningún tipo de guión. "Simplemente sé tú" le decía Andy a Edie. De todas las chicas de Andy, ella era su preferida. Edie se tiñó el pelo como Andy y Andy comenzó a vestirse con leotardos y camisetas XXL como Edie.
Edie era la perfecta encarnación de las fantasías warholianas: tan delicada y distinguida, tan llena de encanto, tan dulce y sin embargo tan deseosa de vivir experiencias nuevas. Sus armarios estaban abarrotados de prendas de firma y abrigos de pieles, pero ella prefería llevar leotardos negros y camisas masculinas. A pesar de su aparente desaliño, siempre estaba espléndida. Combinaba sus camisolas de hombre con sofisticados pendientes largos y zapatos de tacón de aguja.
Entonces Bob Dylan se interpuso entre Edie y Andy. Edie se dió cuenta de que se había gastado casi toda la herencia de sus padres en el alquiler de coches de lujo, las generosas invitaciones a personas que ni siquiera conocía, la ropa, las drogas...
acer amistad con Edie fue para Dylan un modo de incordiar a Warhol. Por su parte, Edie encontró muy divertido al músico y a sus amigos, y además empezaba a aburrirse de ser el florero de un homosexual. Dylan y los suyos eran hetero, y Edie encontró en el sexo otro motivo para desequilibrar la balanza.
Desde este momento la carrera de Edie fue cayendo poco a poco. Su adicción a numerosas drogas le acabaron desfigurando el rostro e hinchándo su cuerpo hasta el límite. Edie murió sola, de sobredosis, no se sabe si intencionada o accidental.
El 26 de Diciembre se estrena en EEUU la película Factory Girl dirigida por George Hickenlooper y con Sienna Miller en el papel principal de Edie.
Lola